Carolina García Rubio (Ekis Verde)
Nací en Melilla, en agosto de 1989, pero viví en el Puerto de Santa María hasta los 18. Cuando cumplí la mayoría de edad me mudé a un piso en Sevilla, para estudiar Comunicación Audiovisual e intentar dedicarme al cine. Estoy iniciándome en la animación mediante cursos, ya que tengo poca esperanza en la Universidad-por sus métodos de enseñanza y sus nuevos planes de estudios-, en la carrera y en las posibilidades que hay fuera en el mundo laboral. Me gusta mezclar creación y técnica en las cosas que hago, por lo que es habitual que adapte poemas, relatos, etc al plano audiovisual. Me encanta viajar y me encanta Barcelona, ciudad en la que estuve viviendo este verano (aunque por un periodo muy corto). Todos esos sitios que visito me sirven también de inspiración.
Ekis verde es un pseudónimo difícil de explicar…Utilizaba mucho el verde en los poemas, para referirme a cosas fuera de lo considerado normal en el imaginario colectivo, algo parecido a la expresión “eres más raro que un perro verde”. La ekis era simplemente para no individualizar un concepto como verde, sino cualquier cosa. Cualquier cosa puede ser diferente de lo habitual, cualquier cosa puede ser verde.
No he publicado nada. Escribí una trilogía cuando estaba en sexto de primaria, que creo que ni mis padres han leído, y un par de relatos cortos que empezaban medianamente aceptables pero que nunca acabaron. Deseché la mayoría de poemas que había escrito antes de llegar a Sevilla y reuní los nuevos en un poemario llamado Epicentro desencajado, que presenté hace poco al concurso organizado por la bella Varsovia. Poniendo punto y final a ese trabajo, ahora estoy trabajando en un nuevo poemario que intuyo que se llamará sketches cerebrales.
Ekis verde es un pseudónimo difícil de explicar…Utilizaba mucho el verde en los poemas, para referirme a cosas fuera de lo considerado normal en el imaginario colectivo, algo parecido a la expresión “eres más raro que un perro verde”. La ekis era simplemente para no individualizar un concepto como verde, sino cualquier cosa. Cualquier cosa puede ser diferente de lo habitual, cualquier cosa puede ser verde.
No he publicado nada. Escribí una trilogía cuando estaba en sexto de primaria, que creo que ni mis padres han leído, y un par de relatos cortos que empezaban medianamente aceptables pero que nunca acabaron. Deseché la mayoría de poemas que había escrito antes de llegar a Sevilla y reuní los nuevos en un poemario llamado Epicentro desencajado, que presenté hace poco al concurso organizado por la bella Varsovia. Poniendo punto y final a ese trabajo, ahora estoy trabajando en un nuevo poemario que intuyo que se llamará sketches cerebrales.
1 comentario:
Qué ganas tengo de escuchar a esta chica, se la ve un buen fichaje para la Revuelta Sureña
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