viernes, 14 de noviembre de 2008
LA REPÚBLICA FEDERAL POÉTICA, hoy en El País
LA REPÚBLICA FEDERAL POÉTICA
ALBERTO FERNÁNDEZ OTTO 14/11/2008
El País Madrid
Cuando nadie te ofrece un plan, organízate tú la fiesta. Éste bien podría ser el lema de la efervescente (y algo ignorada) escena de jóvenes poetas españoles. Y 2008 poetas por Km2, su prototipo. Un festival que se aleja del recital clásico para, según sus organizadores, "priorizar el catering y las buenas bebidas".
SI esperas a que alguien invente lo que buscas, tardará y lo hará mal. Eduard Escoffet, 28 años, poeta y gestor catalán, así lo cree: "Yo provengo de un mundo ácrata llamado Barcelona en el que cuando quieres algo, lo montas y listo. Un día sentí el deseo de crear plataformas de intercambio y visibilidad para la poesía recitada, y lo hice". Su caso no es el único. Ante la apatía institucional, algunos de los jóvenes autores españoles más reconocidos han optado por pasar a la acción y, como en una especie de república federal poética, programar a lo largo y ancho de la península recitales-escaparate en los que cada autor impone las leyes a su antojo.
"El libro de poemas es un invento maravilloso que tardará todavía unos meses en desaparecer", bromea Ben Clark, 24 años, responsable de los recitales más canónicos �y también más raros� que se pueden ver en Salamanca. Aunque a freak le gana Antonio G. Villarán, de 32, más conocido como El Cangrejo Pistolero, fundador de la editorial homónima y anfitrión de Las noches del Cangrejo en Sevilla. Una especie de
Juan Tamariz de la rima que, acompañado de amigos que responden a nombres como Siracusa Indigesta o los Chichimecas, a lo último que aspira es a emular a Cernuda (aunque a ratos lo consiga). Todo lo más, quitarle pose, ego y fachada al género mientras comparten irreflexivamente unas cervezas.
La intención es que cualquiera de estos actos se parezca lo máximo posible a un plan de viernes cualquiera. O ésa es, al menos, la premisa bajo la que se programa este fin de semana en Madrid 2008 poetas por Km2. No es el cómputo inflado de ninguna manifestación, es un festival poético a cargo de Arrebato Libros que invita a autores como el propio Escoffet, Josep Pedrals o Gonzalo Escarpa con la idea de unir cerebros privilegiados y enseñar lo que ellos llaman "la pasión fría de la poesía": menos papel, menos soledad, menos meditación, más fiesta. Todo lo que no sabíamos que la poesía podía ser.
Uno de los responsables, Pepe Olona, lo sintetiza: "Nos interesa una visión más oral, que prescinda del rollo sentimentalista". Para los talleres y actuaciones que celebrarán hoy y mañana, dice, han querido priorizar, con permiso de los poetas catalanes de vanguardia invitados, el catering y las buenas bebidas. "La poesía ya no mata, sólo engorda", prologan en su página web.
"Son los propios creadores los que mejor conocen sus necesidades; yo prefiero que un pintor organice una exposición a que lo haga un funcionario", coincide Escarpa, de 31 años, director del Centro de Difusión Poética de Madrid. "Y si no puede ser en las bibliotecas, que sea en los bares", insiste Elena Medel, poeta cordobesa de 23 años. O en los blogs, territorio de sabios anónimos, donde siempre hay un experto para lo que aún no tiene ni nombre. Existen cientos de páginas personales abiertas por los seguidores de los "directos" poéticos. En ellos dedican críticas y piropos a sus poetas preferidos y les reclaman visitas a su tierra. Como fans, vamos.
Se acabó el poeta petrificado en su celda. Se acabó el poeta maldito que escribe entre resacas. Lo que le toca al nuevo poeta es salir a saludar y buscar la manera de que su obra �o la del colega� se oiga lo mejor posible. Y además, contestar al teléfono, ajustar fechas, reservarle tren y techo al invitado, o algo tan poco poético como buscar financiación para no verse obligado a servir garrafón en los cócteles.
Con todo, hay quienes no detectan todavía grandes diferencias. "Cuando escribo estoy al servicio del texto", razona Escarpa, "cuando trabajo como coordinador estoy al servicio de otro poeta, que está a su vez al servicio del texto. El objetivo es siempre el mismo: decir lo que no se sabe decir, ir más allá de lo que se conoce". Qué queréis, es poeta.
www.poeticofestival.com
YO ME LO GUISO...
Escogemos cinco de los poetas españoles que más horas y teléfono invierten en ilustrar con eventos poéticos las noches de sus respectivas ciudades. Todos confiesan que cuando gestionan se dejan los poemas en casa.
EDUARD ESCOFFET (28 años, Barcelona)
Desde Cataluña para el mundo / www.propost.org/escoffet
Poeta catalán que hace años hizo el punki en Barcelona en lo que a programación cultural se refiere, y que por ello se llevó la tan plasta calificación de niño malo. Coordinó durante cuatro años el festival Proposta, de los más prematuros en la difusión poética, y hoy gestiona la plataforma projectes poètics sense títol-propost.org, dedicada a intercambios internacionales con otros autores. Su visión sobre la poesía no tiene prejuicios: "Una vez, una rapera adolescente me retó a rapear porque yo decía que era lo mismo. No rapeé, pero leí un poema. Se quedó a cuadros. Entendió que los poetas no escribimos para ser leídos antes de dormir".
ELENA MEDEL (23 años, Córdoba)
La Polonia cordobesa / www.elenamedel.com
Mimada como poeta desde joven, actualmente vive en la Residencia de Estudiantes de Madrid, pero su proyecto está en Córdoba y se llama La Bella Varsovia, un colectivo que coordina a medias con la también poeta Alejandra Vanessa. Su actividad estrella es la fiesta polaca: entre cinco y diez minutos para quien quiera soltarse con su obra. Dice que es un intento de escapar del "recital de flexo, botellita de agua y turno de pregunta". Dice contar con participantes reincidentes a los que intentan apoyar desde una labor editorial "para la que en ocasiones el presupuesto no alcanza". Para no aburrirse, tiene un proyecto común con el Cangrejo Pistolero con el melodioso nombre de The Pata Negra. Jachondeo andalusí.
GONZALO ESCARPA (31 años, Madrid)
El alma de la fiesta / www.escarpa.net
Gonzalo Escarpa es el Alaska de la actual movida poética madrileña. Tiene cara de salir todas las semanas en la portada de SuperPop, y, sin embargo, es uno de los gestores culturales más respetados. Por algo dirige el Centro de Difusión Poética de Madrid, además de programar eventos como el ciclo Poesía rara que te cagas, una entre las muchas historias en las que tiene metida la cabeza. A sus 31 años, ha hecho tanto que, para no aburrir, ofrece en su web una versión extendida y otra abreviada de su currículo. Está tan convencido de lo que ofrece como el buen frutero de su género: "La poesía puede ser cool o retro, avant-garde o vintage: lo importante es que esté bien hecha, servida y consumida".
YOLANDA CASTAÑO (31 años, Santiago de Compostela)
La poeta de la tele / www.yolandacastano.com
Hace unos años dirigía y presentaba su propio programa de televisión en TVE Galicia dedicado a artistas de vanguardia. Demostró que tenía share suficiente para hacer y deshacer lo que quisiera en el oficio de la gestión poética. Además de seguir colaborando de lunes a jueves en un programa, ha organizado recitales y talleres literarios en casi todas las ciudades gallegas. Describe la labor del animador cultural como la de un "ojeador" que observa a nuevos poetas en festivales extranjeros o busca libros casi desconocidos para llevárselos a su equipo y compartirlos. "Significa un estímulo para dárselo también a conocer a otros". Está a punto de publicar Profundidad de campo en la editorial Visor.
BEN CLARK (24 años, Ibiza)
El hombre que recitó en el ring / www.benclarkpoeta.blogspot.com
De origen ibicenco y genética galesa, coordina la sala Marte Poesía en Salamanca, "un espacio experimental y libérrimo que el poeta puede aprovechar para experimentar con distintas formas de comunicar la poesía". Tan distintas que una vez se lió a puñetazos con otro poeta en el Campeonato Mundial de Poetas Pesados, un recital en forma de combate de boxeo donde lo menos importante era recitar. Asegura que la gestión cultural es de todo menos gestión y cultura, pero que es la forma de ganarse la vida más cercana a su oficio que hay. Como autor, puede fardar de premio Hiperión y acaba de reeditar su libro Cabotaje en la editorial Delirio.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario