EL AMANTE DE LA CHINA DEL NORTE
Mira que somos absurdos…
yo con mis sandalias resquebrajadas
los pies sucios de salpicar en el cielo
y tú permitiendo a las hormigas
el recreo estival de los insomnes.
No sabía cómo estar desnuda y pálida,
desgarrando las costuras de la noche
sábanas-crujidos-falta del aliento
me acurruco a pensar en el baile,
violines-jazmín-marea de incendios.
Alguien ha roto el mutismo y
yo sueño que no me sueñas.
Mon amour, silueta de humo,
tu cuerpo me agria la boca
y me agrieta las entrañas
cuando me penetras descuidadocon esos ojos tristes de lobo.
Laura Rosal
No hay comentarios:
Publicar un comentario